miércoles, 22 de julio de 2009

Denuncian abuso por parte del presidente municipal de Copainalá

Ha despojado de dos predios a un ciudadano, en complicidad con un funcionario de gobierno
ABENAMAR LÓPEZ
Noticias
Un grupo de delincuentes, dirigidos por el presidente municipal de Copainalá y un funcionario de gobierno, despojaron de manera violenta de sus dos terrenos a un habitante de ese municipio, señaló el afectado en entrevista.
Carmelino Vásquez López contó que de manera sorpresiva, el 31 de enero de 2008 llegó a su domicilio ubicado en la cabecera municipal de Copainalá, el alcalde Rodolfo Elí Martínez Morales, quien le pidió le donara o vendiera parte del predio El Retazo, de 10 metros de ancho y 550 de largo,.
Carmelino le respondió que no le podía regalar el terreno que desde hace más de 30 años le pertenece, pues era parte del patrimonio familiar, pero que si le daba una toma de agua lo podían negociar. Quedaron de verse en El Retazo al siguiente día.
El 1 de febrero, Carmelino acudió en compañía de sus hijos Ernesto Gerardo y Alberto Carmelino Vásquez López. En el lugar estaba el presidente municipal, un ministerio público, Juan Reyes Jiménez, y un grupo de 30 personas pertenecientes al grupo denominado El Carmen, quienes a la brava los insultaban.
Luego, los golpearon salvajemente y los amarraron. Al cuestionar porqué eran amedrentados, el presidente dijo que tenía que firmar un documento donde cedía los derechos del terreno, a lo que Carmelino se negó en hacer.
En respuesta, el alcalde ordenó que ahorcaran a uno de sus hijos, por lo que el grupo enardecido le colocó una soga al cuello y comenzaron a lastimarlo, mientras otros grababan la escena. Ante esa presión, Carmelino tuvo que firmar el documento.
En ese momento, un trascabo comenzó a tirar el alambre de púas que divide su terreno, después fueron liberadas las tres personas.
Carmelino y sus hijos tuvieron que recibir atención médica por los golpes recibidos; su hijo, el que sería ahorcado, aún tiene cicatrices de la agresión.
Ya repuestos, interpusieron la averiguación previa 73/CAJ/C9/2008 por los delitos de privación ilegal de la libertad, en su modalidad de plagio o secuestro; abuso de autoridad en contra del presidente municipal, del ministerio público y de policías que presenciaron la golpiza, mismos que no hicieron nada para detenerla; robo con violencia y asociación delictuosa.
Al interponer la demanda penal, intervino Ismael Brito Mazariegos, subsecretario de Operación Regional Zona Centro, a favor del presidente municipal, para que se retirara la demanda, y se comprometió a que le serían resarcidos los daños.
Fue así que el 8 de diciembre de 2008, en la sala de junta de la Subsecretaría de Operación Regional I Centro, firmaron una minuta -copia del documento obra en poder de esta redacción- donde se comprometían en pagarle los daños a más tardar el 15 de enero de 2009.
Llegada la fecha pactada, no les pagaron. El presidente se excusó diciendo que aún no recibía un crédito, y que no le podía pagar.
Las cosas no quedaron ahí. El 20 de mayo del presente año, el grupo El Carmen le invadió el predio Zacate Largo, orden que fue dada por el presidente municipal, talvez como medida represora por no haber retirado la demanda penal. En la invasión fue golpeado severamente Marcelino Hernández Hernández, empleado de Carmelino.
Además, le desaparecieron 25 vacas y le talaron varios árboles de madera preciosa. Nadie nos sacará de acá; defenderemos esta tierra a machetazos, acordaron los delincuentes.
Al avisarle a Brito Mazariegos de la nueva invasión, éste les contestó con un documento -copia obra en esta redacción- donde le hacían saber que no podía tomar posesión de su predio hasta que se llevara acabo una reunión entre autoridades agrarias, el presidente de Copainalá y el grupo invasor, pero el propietario no fue invitado y nunca le avisó a qué determinación llegaron.
La orden de aprehensión no ha sido girada por Ernesto Alfredo Martínez Lara, juez mixto de Primera Instancia de Copainalá, pues ha recibido órdenes de Brito Mazariegos de no hacerlo, acota.
Hasta Manuel Sánchez Ozuna, subdirector de Control de Procesos Zona Centro, ha intervenido para que la orden de aprehensión sea negada.
Desde el momento de la golpiza hasta la fecha, la salud de Carmelino y de Ada Celia Vásquez Aguilar, su esposa, ha disminuido considerablemente, pues además reciben constantemente amenazas de muerte vía telefónica.
Los invasores amenazaron a don Carmelino y a doña Ada Celia, que si se libra la orden de aprehensión van a quemar a don Carmelino y ahorcar a sus hijos. Por ello, “lo que le pase mi familia responsabilizo a Rodolfo Elí Martínez Morales, Ernesto Alfredo, Ismael Brito Mazariegos y a Juan Reyes Jiménez, presidente del Consejo Municipal de Seguridad Pública”, señalado como líder intelectual de los invasores.
Está a punto de armarse una gresca entre invasores y familiares de Marcelino Hernández, el trabajador de Carmelino que fue golpeado, pues dijeron que no dejarán las cosas como están, y tomarán venganza.
“Pedimos la intervención del gobernador del estado, para que se reparen los daños que hemos sufrido, que se nos entreguen los predios tal y como estaban, que se cumpla la minuta firmada el 8 de diciembre, que se libre la orden de aprehensión y que sean devueltas las 25 vacas que desaparecieron”, finalizaron.

3 comentarios:

  1. por esas y muchas cosas mas nuestro pais no abanza porqe las autoridades se hacen dela vista gorda y estan del lado del mas fuerte ydejan a un lado las leyes pero esa personas solo merecen el repudio y la desconfiansa dela sociedad...

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  2. eso es que hoy en dia juan reyes jimenes asta regidor es que confianza con esta persona déspota y prepotente que asco.

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  3. a hora no solo este abuso a cometido este tipo de Rodolfo Martínez morales en su ex ,presidente si no que hoy en día ya mando a despojar a unas personas del ejido nuevo milenio mpo de copainala junto a Elpidio alcara ,hermanito de Elpidio .un catedrático el Prof. Rosario calderón reyes entre otros no es justo que las autoridades de copainala no hagan nada para parar estos abusos que gacho no.

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